En su ya lejana juventud, los viejos del palco eran aficionados al modelismo (estático y militar para ser exactos). Una cosa lleva a la otra, y... +/- Leer más
el modelismo les llevó a la revista "Military Modelling". Un día, motivados por sus aficiones y alentados por una moderada consumición de cerveza, publicaron un anuncio en dicha revista pidiendo gorras militares de cualquier parte del mundo. Durante unos años cambiaron prendas de cabeza (así se les llama a lo fino) con gente del Reino Unido, Polonia, Nueva Zelanda, Australia y otros exóticos parajes. Si bien sus achaques no les permiten continuar con figuras y maquetas con el ritmo y dedicación que a ellos les gustaría, todavía, de vez en cuando, despliegan sus archiperres bajo la luz del flexo y se ejercitan en tan noble afición. Lo que sí que han conservado y mantendrán hasta el último de sus días es esa persistente manía de pedir a todo el que conocen (o no) que les traiga una gorra militar de su destino de vacaciones, trastero a vaciar o casa de sus abuelos a derribar. En este blog se recogerán pensamientos repentinos, ideas (las más de las veces descabelladas), vivencias publicables y se compartirán con la audiencia las adquisiciones gorrísticas (o de gorra) acumuladas a lo largo de tantos y tantos años. Y por qué no, alguna que otra figura recién pintadita, antes de que el polvo cubra sus detalles.

lunes, marzo 31, 2008

teórica de boinas uno

La boina (o funda-mental) militar no es algo que caiga del cielo y uno trate de enhebrarse entre los cuernos si los tuviere o que se coloque de cualquier manera y a la buena de Dios. Todo está reglamentado, incluso en Holanda, queridos, y hasta para eso existe o la forma correcta, con leves toques personales de cada uno, o una gran variedad de posibilidades, desde la más artística hasta la más garrula, pero todas ellas antirreglamentarias.

Hasta donde yo sé, todas los cuerpos pertenecientes a fuerzas armadas de Europa occidental que usan boina lo hacen colocando la insignia en alguna parte entre la oreja y el ojo izquierdos y dejando caer (más o menos) el vuelo de la misma hacia la derecha. Ireis viendo algunas y podeis repasar las ya publicadas.

Esto vale para todos menos Francia y España, donde, salvo excepciones que comentaré más abajo, se hace justo al contrario (emblema a la derecha, caída hacia la izquierda).

¿Excepciones? ¿En Francia y en España? No tantas como en gramática, pero algunas:

en Francia, los cazadores de montaña llevan una boina tipo toldo de plaza de toros, de color negro (o blanco por la cosa de la nieve), tan grande que es difícil decir para qué lado cae, aunque predomina el cubrir la oreja izquierda. Vendría a ser como una mezcla entre ovni en pleno aterrizaje y champiñón veneoso mutante. Los cazadores vistos patrullando alrededor del Louvre el verano pasado la llevaban prácticamente "horizontal". Los comandos fusileros de marina, parece ser que en recuerdo de cuando sus brothers británicos les equiparon, conservan en su boina la caída del lado inglés.

En España, la marinería utilizaba una boina azul con ancla en óvalo amarillo que debía llevarse con el emblema centrado y con vuelo a ambos lados. En los setenta y primeros ochenta, los carristas de la D.A. (División Acorazada para unos, Despojos Americanos para otros) también utilizó un boinón en negro con emblema al centro y caíada a los dos lados con badana hecha del mismo material que la boina misma.

Como nota curiosa, hasta que se diversificaron los distintos emblemas en España para tropa, suboficiales y oficiales, adoptando el sistema ya vigente en la Armada, se acompañaba al susodicho la divisa correspondiente al grado (galones y/o estrellas). Curiosamente, los terrícolas (el Ejército de tierra) las colocaba a la derecha del emblema, o sea, más cerca de la cara, mientras que "mi gente", el glorioso cuerpo de Infantería de Marina (el que nunca retrocede, ya sabeis, da media vuelta y sigue avanzando), las colocaba a la izquierda, más hacia la oreja.

Señalar también que las tropas francesas y españolas bajo mando de la ONU, los famosos "cascos azules" llevan boina azul celeste pero con la caída a la derecha, al lado contrario del que están acostumbrados, lo que acarrea a veces algunos problemas de colocación.

Interesante, ¿a que no?

Fotos de aquí, de aquí, de aquí y de aquí.

Referencias bibliográficas, las de siempre, Osprey, Brian Davis, Andrew Mollo y J. M. Bueno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario