Inspirado por el comentario de nuestra mas fiel seguidora y corresponsal, de nuestro amplio equipo de corresponsales compuesto de 1 corresponsal, en El Cairo, aquí dejamos estas perlas:
Pueblito del oasis El Fayum, que no son cuatro palmeras y un charco, si no un lago que te cagas y un montón de kilómetros cuadrados verdes:
Nótese la mierda de tablita donde el tipo este está sentado y trabajando sobre la misma.
Otra vista de la misma "construcción".
Puerto fluvial de Edfu. Esto si es seguridad en el trabajo, aunque no lo parezca, es el mejor remedio contra las hernias de disco, un tipo clava una pala y otros dos, si dos, tiran de ella con cuerdas para repartir la arena.
El Cairo. Véase un andamio de mas de cuatro plantas de maderitas como si lo hubiera montado un asiduo del Leroy Merlin.
El Cairo, al borde de lo que viene a ser la M-30 de alli, claro con la salvedad de las dimensiones. Los pisos, por lo visto, no se venden terminados, se vende el hueco y luego cada uno se hace la casa como quiere o puede, nuestro corresponsal podra confirmarlo.
El Cairo, si es solo un palomar, pero quien se atreve a subir a poner cañamones a las palomas?
viernes, febrero 29, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me ha encantado la foto de los tres sujetando la cuerda, vamos... no se vayan a caer jajajajjaaj
ResponderEliminarGracias por las sonrisas...
Besos
La idea de "cubrir" el hueco al gusto no me parece mala. En este sentido podríamos estar hablando del alto nivel que tienen los egipcios en cuanto a conocimientos arquitectónicos y lo que tiene de ingeniería. Un selfservice arquitectónico en el que cada uno ajusta presupuestos a su medida. Eso sí, las medidas de seguridad y prevención me resultan un tanto escasas. Si Le Corbusier o Loos levantaran la cabeza...
ResponderEliminarPues andamiazo que te crió, sobre todo Loos, que la tenía más gorda (la cabeza). Con tanta tabla colgando por todas partes...
ResponderEliminarPues no se la recuerdo yo muy gorda cuando coincidiamos en el gimnasio, la cabeza, ni el resto, no
ResponderEliminarViejo más joven: después de que coincidiérais en el gimnasio, fue cuando mi admirado Loos editó aquello de Ornamento y delito ¿no?
ResponderEliminarDe hecho ya aquel dia me solto eso de "el ornamento esta sujeto a la moda y sólo puede responder al capricho y a la ambición femenina –ya que el ornamento al servicio de la mujer perdurará eternamente, cuyo ornamento responde, en el fondo, al del primitivo salvaje, teniendo un significado erótico".
ResponderEliminarSin palabras, nos dejo a todos sin palabras, el tio.
Y a mí me dieron ganas de nuevo de hacer la ola cuando me lo contaste, lo recuerdo bien.
ResponderEliminarPor aquellos tiempos yo era más de ouzo en la terraza, nefasta influencia de los paleomalakas.
Confirmo!!!!.
ResponderEliminarLo de comprar el hueco y hacerlo al gusto estaría bien si hubiera profesionales capaces, ya no de darte en el gusto, sino de hacer su trabajo con un mínimo de calidad.
Nosotros compramos un piso en una zona "chachi" de El Cairo, con la idea de hacerlo a nuestro estilo: minimalista, moderno, funcional... y ¡BIEN!. Después de 6 meses de desesperación y tirar el dinero sin tregua, acabamos alquilando un piso en otra zona que nos gustaba, terminado y funcionando, con toda la pena que nos daba comparar con nuestro piso "casi" terminado. Tanta desgracia y barbaridad acabó por hacer que al pasar por delante nos dé repelús mirarlo y, sinceramente, no queremos ni pensar en él, después de todo lo que nos ROMPIERON.
Si de los egipcios de ahora dependieran las pirámides y demás obras milenarias, la historia se hubieran saltado muchas páginas :-(