llevo dándole vueltas a la cabeza desde principios de agosto y tengo que soltarlo:
en mi barrio, que es el que Madrid tiene en el campo, o sea, Aravaca, hay un gimnasio. Está en la calle más transitada, y hace esquina con otra calle sube hasta la carretera de la Coruña. Quiero decir que si hay problemas de circulación, sólo pueden ser en ese cruce. Pues dos mañanas no consecutivas, y a diferentes horas, vi como varios grandes coches todo-terreno ocupaban esa esquina, la de la puerta del gimnasio, subidos a la acera, en doble y hasta en triple fila.
Me pregunto a qué va el personal al gimnasio, si no puede aparcar a quince o veinte metros del mismo su enorme y contaminante coche y andar un poquito, ¿a correr grácilmente sobre una cinta, mostrando elegantes calentadores de marca y con la cola de caballo "au vent"?, ¿a machacarse las piernas levantando peso para eliminar esos miligramos de grasa que tanto afean sus figuras?, ¿a ponerse al borde de un ataque cardíaco jugando al squash durante quince minutos, porque-luego-tengo-cita-con-el-asesor-financiero-sudo-un-poquito-y-lo-dejo?
¿Hemos perdido el norte ya del todo? Ellos más que nosotros.
jueves, septiembre 02, 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Eso se llama FALTA DE RESPETO y afecta a esa subespecie que tú describes y a otra subespecie que nos invadió en agosto la urbanización, tranquila hasta que llegaron, y que nos han dado ganas de mudarnos AGAIN!.
ResponderEliminarEn nuestro caso son los hijos de los autóctonos, emigrados al Madrí Sur, que viene de veraneo al pueblo con sus cachorros incívicos y montan fiestas hasta las mil, gritan por las noches, taponan con las bicis las entradas, dan balonazos a diestro y siniestro, trepan por las puertas de los chalés colindantes para recoger los balones sin esperar a que les abras la puerta o se los devuelvas tú, invitan a todos los coleguitas de la comarca y meten doscientos coches en el garaje, dejan todas las puertas abiertas noche y día... Y, además de todo ello, miran con cara de culo y no saludan al cruzarse contigo. Y te dan unas ganas de desterrarlos del planeta a hostias... Grrr!!!! :@
El mejor método de destierro, sin duda alguna.
ResponderEliminarQué buenas preguntas. Más de acuerdo no puedo estar.
ResponderEliminarOtro ejemplo reciente de nuestra estupidez a cuatro ruedas: un chico minusválido no pudo entrar a los juzgados en Jaén, porque sus señorías los funcionarios habían aparcado en la misma puerta:
http://www.andaluciainformacion.es/portada/?a=138966&i=35&f=0
¡A ver cuándo nos enteramos de que andar es bueno!
Un abrazo para todos los viejos del palco.
Lo que sea por no andar.
ResponderEliminarDespués irán diciendo que ellos hacen mucho deporte.
Por cierto podéis visitar mi nuevo blog en:
http://www.esconditedelvago.com
Saludos!!